Según la zona que queramos tratar y las características del paciente utilizaremos diferentes tipos de peeling:
Peeling Superficial
Mediante este tipo de peeling más superficial tratamos la hidratación y regeneración de la piel, mejoramos la flacidez, trabajamos sobre las arrugas finas y las pequeñas marcas y manchas del rostro.
Una vez realizado el tratamiento puede producirse un leve enrojecimiento cutáneo que desaparecerá al cabo de unas horas, por lo que se puede retomar la rutina diaria. Aproximadamente se realizan entre 4 y 6 sesiones con un intervalo de entre 4-5 semanas.
Peeling Medio
El peeling medio está indicado para tratar arrugas marcadas, las manchas propias de la edad, del embarazo, de la toma de anticonceptivos y también es efectivo con las pecas. Asimismo puede tratar marcas profundas de acné.
La duración de este tratamiento suele ser entre 1 y 4 sesiones.
Después del peeling, la zona queda enrojecida durante aproximadamente de 3 a 5 días, y la piel puede descamarse poco a poco. Es muy importante utilizar protección solar durante todo este período. Una vez curada, la dermis lucirá más elástica y reafirmada, y con una tonalidad mucho más uniforme y luminosa.
Peeling Profundo
El peeling profundo mejora la piel muy fotoenvejecida, flácida, con arrugas profundas y manchas importantes. Pueden realizarse entre una y tres sesiones separadas en el intervalo de un mes, o mes y medio, según el tratamiento y la profundidad a la que necesitemos llegar.
La piel se verá enrojecida durante unas semanas y se descama. El paciente también seguirá un tratamiento domiciliario con cremas que proporcionaremos en la consulta para recuperar completamente esta dermis. El resultado es un rejuvenecimiento integral de la piel, una disminución de las marcas, las manchas y las arrugas muy satisfactorio.